[Rivas Vaciamadrid] ZBE: Una excusa para restringir tu movilidad

Conocemos a las ZBE (Zonas de Bajas Emisiones) como áreas dentro de una ciudad donde los vehículos más contaminantes están regulados. Normalmente, esto significa que los vehículos más contaminantes no pueden entrar a esta área o deben pagar un cargo. Las ZBE suelen ser la medida más efectiva que las ciudades pueden establecer para mejorar la contaminación del aire.

Una de las finalidades de las ZBE es incentivar a los propietarios de los vehículos más contaminantes a comprar vehículos más limpios, modificar sus vehículos para que contaminen menos, hagan uso del transporte público o para que utilicen formas alternativas de transporte.

En Octubre de 2023, Rivas presumía de ser de los primeros municipios españoles en establecer ZBE; a través de la página del ayuntamiento de Rivas (muy bien detalladas) e incluso del RACE es posible acceder a las ZBE de Rivas, que afectan principalmente a colegios del municipio. En la imagen inferior podemos ver la cobertura ZBE del CEIP Saramago y colegio Luyfe:

Por desgracia, una medida que puede parecer coherente se vuelve infame cuando en el caso de nuestra ciudad, una Zona de Bajas Emisiones se convierte en una Zona de Movilidad totalmente Restringida. Por suerte, ahora mismo sólo afectan a entornos escolares y en momentos puntuales, aunque esto podría cambiar ya que en 2022 diariodeRivas ya nos informaba que todo Rivas sería ZBE con excepción del polígono. Desconocemos los estudios ambientales y de impacto económico y social con que el ayuntamiento cuenta para definir estas políticas, si es que no tratan un problema social desde un punto de vista ideológico y fuera de lo racional.

Cabe preguntarnos hasta qué punto es necesario que el municipio al completo se convierta en una ZBE y sobre todo, qué normativa se aplicaría, ya que la restricción total de movilidad de la población atentaría contra las libertades de movilidad de la ciudadanía, más cuando ni siquiera Rivas cuenta con una infraestructura pública de transporte que cubra las necesidades reales de movilidad de la sociedad, contando con un transporte urbano prácticamente inexistente y aún gracias a los autobuses que el Consorcio Regional de Transporte de Madrid pone al servicio de los vecinos ripenses en suplencia de dicha red de autobuses urbanos.

Al contrario que en Rivas, en otras localidades de España y Europa, la implantación de Zonas de Bajas Emisiones lleva consigo una normativa más racional donde vehículos de bajas o nulas emisiones sí pueden circular según la clasificación del vehículo.

Clasificación de los vehículos según normativa de emisiones EURO

En Europa, los vehículos se clasifican según las normas EURO desde 1993. Pueden encontrarse hasta 6 normas EURO diferentes. En la siguiente tabla se muestran las características de las normas EURO para motores de gasolina y diésel, así como su año de aplicación (RAC, 2023). Interesante observar su evolución a lo largo del tiempo:

Más adelante, en otro artículo, atacaremos la visión más científica en cuanto a qué estamos atacando con estas medidas ambientales (HC, NOx, PM).

En España, acorde a esta normativa, se ha diseñado una clasificación basada en distintivos ambientales, sin tener en cuenta otros factores.

Distintivos ambientales

El distintivo de emisiones, también conocido como distintivo ambiental, es un indicador visual que se muestra en un vehículo para señalar el cumplimiento con estándares ambientales específicos.

Cada país puede definir los distintivos de emisión en función de sus necesidades, basándose en las normas EURO. Por lo general, estas insignias se corresponden con una pegatina que se muestra en el parabrisas de cada automóvil. Cada pegatina servirá solo para un país; si un automóvil debe desplazarse a otro país, deberá buscar las pegatinas y regulaciones de ese país y adaptarse a ellas.

Por ejemplo, España ha definido 4 distintivos con 4 colores distintos: Cero emisiones (azul), Eco (verde y azul), C (verde) y B (amarillo).

• La insignia de Cero emisiones incluye vehículos eléctricos con batería (BEVs), vehículos eléctricos de autonomía extendida (REEVs), vehículos eléctricos híbridos enchufables (PHEVs) con un alcance de al menos 40 km y vehículos eléctricos de pila de combustible (FCEVs).

• Eco incluye vehículos híbridos y de gas natural.

• C incluye vehículos a gasolina que cumplen con la norma EURO 4 y vehículos diésel que cumplen con la norma EURO 6.

• B incluye vehículos a gasolina que cumplen con la norma EURO 3 y vehículos diésel que cumplen con la norma EURO 4.

En el momento de otorgarse estos distintivos, se publicitó erróneamente el corte de emisiones por fecha y no por normativa, es importante que revises la normativa de emisiones de tu vehículo porque podrías estar portando la pegatina equivocada, algo habitual en muchos vehículos de grupos como VAG o General Motors, que pudiendo portar un distintivo ambiental "C", llevan un distintivo "B", lo cual afectará a su movilidad e incluso a las tasas que podría pagar, por ejemplo, en un estacionamiento público.

Aprovechamos para recordar e informar a los usuarios, que es posible mejorar la clasificación de un vehículo con las inversiones adecuadas, previa homologación. Un ejemplo es un vehículo de gasolina que cumpla normativa Euro IV o superior y al que se le acople un sistema de alimentación por gas licuado de petróleo, que pasaría a clasificarse como ECO. También puede ocurrir que su coche por año no disponga de pegatina pero que sí le corresponda por normativa Euro que cumpla.

Regulaciones específicas para cada tipo de vehículo

Acorde a la Las regulaciones de cada país, algunas tienen en cuenta además de la fuente de energía (gasolina/diésel), el tipo de vehículo.

El tipo de vehículo puede ser coches, furgonetas ligeras, vehículos de carga pesada (HGV), motocicletas.

Un ejemplo de es París donde las regulaciones están activas diariamente para los HGV y solo en días laborables para los demás.

Otro ejemplo es que las ciudades pueden otorgar diferentes permisos y distintivos a diferentes tipos de vehículos, por ejemplo, los HGV diésel están permitidos al menos hasta la norma EURO 6, mientras que los automóviles diésel están permitidos al menos hasta la norma EURO 5.

Tarifas y Multas

Gestionar el tráfico de los vehículos que no cumplen con las regulaciones de la ciudad y que entran en Zonas de Bajas Emisiones implica emplear diversos enfoques, principalmente a través de tarifas y multas.

Una tarifa sirve como una herramienta para incentivar a las personas a cambiar a modos de transporte más sostenibles. Básicamente, actúa como un estímulo financiero para que las personas adopten alternativas respetuosas con el medio ambiente, contribuyendo así al objetivo general de reducir las emisiones en la ciudad.

Por otro lado, una multa representa una sanción impuesta por las ciudades a los propietarios de vehículos que violan las regulaciones dentro de las Zonas de Bajas Emisiones. Esta multa actúa como un elemento disuasorio y tiene la intención de desalentar el incumplimiento de la ley. Al imponer sanciones a los infractores, las ciudades buscan hacer cumplir las regulaciones, mantener los estándares de calidad del aire y asegurarse de que los beneficios de las Zonas de Bajas Emisiones no se vean comprometidos por vehículos que no cumplen con los estándares de emisión requeridos.

Si desde la plataforma tenemos que apostar por la existencia de las ZBE (imposición europea), desde luego abogamos por un sistema de tarifas donde el usuario libremente pueda optar o no, previo pago, a acceder con su vehículo a una zona restringida de forma habitual para su vehículo.

Exenciones

Cada ciudad puede determinar exenciones en sus regulaciones, por ejemplo, vehículos utilizados para transportar a personas con enfermedades que limitan su uso al transporte público, vehículos utilizados para transportar a personas con movilidad reducida, servicios de emergencia y servicios esenciales, y vehículos con licencia extranjera que cumplan con los requisitos para circular.

Permisos

Es posible expedir permisos especiales, por ejemplo de acceso ocasional de 24 días, para vehículos vintage y clásicos, vehículos utilizados para transportar personas que deben someterse a tratamientos médicos periódicos o vehículos especiales que brindan un servicio o actividad excepcional.

¿Qué pueden hacer las ciudades para disminuir la contaminación del aire además de implementar una zona de bajas emisiones?

Mientras que una zona de bajas emisiones restringe el movimiento de vehículos altamente contaminantes en un área, no siempre es suficiente para reducir la contaminación por sí misma y se requieren medidas adicionales para abordar de manera integral el problema (Urban Access Regulations in Europe, 2023).

Medidas relacionadas con el transporte y la movilidad

Aunque la implementación de medidas inherentes a la movilidad puedan parecer sencillas, lejos de la realidad, no todo se basa en seguir un manual, como parece que se ha hecho en Rivas, donde se han implementado carriles bici peligrosos para todos los usuarios y cuyas eróticas consecuencias, lejos de reducir el tráfico, aumentan los atascos, terminan siendo utilizados para fines no previstos, sino que además no se ha provisto a la ciudadanía de una red de transporte público adecuada, ni tampoco hay compañías que trabajen en el municipio con iniciativas car-sharing. De hecho el servicio de Taxi del municipio es el de la propia ciudad de Madrid.

Por suerte, el ayuntamiento sí que facilita la adquisición de vehículos limpios a través de una bonificación en el IVTM.

Podemos puntualizar las medidas relacionadas con transporte y movilidad de la siguiente forma:

• Las medidas destinadas a disminuir el volumen de tráfico y mejorar las opciones de transporte alternativo incluyen la promoción de un transporte público eficiente y respetuoso con el medio ambiente, la provisión de una infraestructura de carriles bici bien de calidad, la implementación de programas de uso compartido de automóviles de baja emisión y la adopción de estrategias de planificación urbana adecuadas.

• La implementación de peajes urbanos o regulaciones de acceso específicas para vehículos o viajes ayuda a reducir el tráfico, asegurando una movilidad más eficaz para aquellos que dependen de vehículos motorizados. Incentivos para vehículos respetuosos con el medio ambiente, como impuestos reducidos, peajes más asequibles y subvenciones para vehículos eléctricos o híbridos contribuyen a fomentar prácticas de transporte más limpias.

• Los esfuerzos para optimizar el flujo de tráfico, como los semáforos sincronizados, resultan beneficiosos para mejorar el movimiento general de vehículos. Además, imponer límites de velocidad reducidos en carreteras de alta capacidad no solo mejora la eficiencia del tráfico, sino que también garantiza que los vehículos operen a velocidades más limpias y eficientes en combustible.

• Los estímulos para la adopción de vehículos más limpios, incluidos aquellos con emisiones cero, vehículos eléctricos, de hidrógeno e híbridos, o vehículos equipados con filtros de partículas diésel, desempeña un papel fundamental en la promoción de un transporte ambientalmente consciente.

• Campañas informativas que aborden prácticas como apagar los motores mientras están estacionados para evitar el ralentí, junto con iniciativas generales de conciencia sobre los niveles de calidad del aire, contribuyen a fomentar un compromiso colectivo para reducir la contaminación y promover hábitos de transporte sostenibles.
• Adoptar vehículos de servicio más limpios en el ayuntamiento, que aún cuenta con vehículos de gran antigüedad que no cumplen ni siquiera con normativas Euro suficientemente modernas como para tener pegatina clasificatoria.
• Promover sistemas de transporte público basados en energía eléctrica.
• Promover la instalación de nuevos puntos de carga en nuestras calles.

Medidas no relacionadas con el transporte y la movilidad

A modo de ejemplo, se pueden promover o mejorar las siguientes medidas (algunas ya en funcionamiento en el Ayuntamiento de Rivas):

• Regular las emisiones de las fábricas y de las centrales de energía.
• Promover comunidades energéticas sostenibles como se ha hecho en la urbanización "Pablo Iglesias" y edificios públicos autosostenibles.

• Implementar controles en zonas en construcción, como minimizar el polvo de las demoliciones.

• Mejorar la eficiencia energética para reducir el consumo de combustible y las emisiones.

• Regular el uso de carbón, petróleo o de la madera como combustibles.

• Promover sistemas de calefacción más limpios mediante subvenciones o regulaciones.

• Promover que funcionarios, concejales, alcaldesa y resto de personal que dispongan de salario público se desplacen en transportes sostenibles, bien sea en bicicleta o transporte público, dando ejemplo del esfuerzo que solicitan a los vecinos además de confianza en sus medidas, sin dar lugar a una colosal hipocresía.
• Continuar promoviendo la ampliación de masa arbórea en los alrededores del municipio como se ha hecho en otras ocasiones, que permita filtrar el aire del municipio y contrarrestar las emisiones irremediablemente producidas.
• Mejorar el modelo urbanístico en la medida de lo posible para que los vecinos tengan la mayor parte de servicios sin requerir grandes desplazamientos en coche.

Conclusiones

La incorporación de las Zonas de Bajas Emisiones a los núcleos urbanos son ya un hecho, una realidad que debemos asumir como una imposición europea y un reto en la búsqueda de un impacto medioambiental lo más reducido posible en favor de una calidad ambiental mayor respecto a la que hasta ahora hemos podido disfrutar.

Pero este objetivo último no debe ser únicamente a costa de la movilidad de la gente, organismos públicos y privados deben contribuir de forma solidaria y nunca coercitiva, alineando recursos de forma racional, con estudios de impacto social, económico, salubre, etc., así como aplicando soluciones inteligentes e innovadoras que lejos de complicar la movilidad de los vecinos, otorgue a éstos un abanico de posibilidades donde libremente puedan elegir qué medio, cómo y cuándo moverse, con el menor coste posible.

De lo contrario, se estará dictando a la ciudadanía el cómo han moverte, después sólo quedará indicar a dónde, o si pueden hacerlo, cosa que harán estableciendo dicotomías y haciendo uso de una demagogia que busquen criminalizar al ciudadano.

Que las bondades ecológicas no adulen sus oídos, porque quizás, en un momento dado, tendrán que escoger entre tiranía y libertad.